Reflexiones en clase...

10-02-2012
Este mundo es tan egoista, tan hipócrita y sobretodo, tan falto de educación...
Alguien hace un favor, y en vez de tomarlo con gratitud, le arrinconan, y lo toman como algo obligatorio.
Ahora mismo, fijo mi atención en los que me rodean, y no sé si será porque a mi me educaron diferente, o porque nunca me ha gustado el continuo y absoluto alboroto, del cual ahora me rodeo.
Es cierto, que a veces me gusta inundarme de voces que me animen y fortalezcan m espíritu, que hoy, yace cabizbajo sobre este suelo frío y solitario, que nadie parece tener en cuenta.
Sin embargo, este jaleo es tan atípico, tan falto de conciencia y sobretodo, ya es tanta la costumbre que, me cuestiono si mis valores hoy me convierten en un bicho raro, e interrogo a mi propio pensamiento, sobre el hecho de porqué les gustará tanto inundarse en cotilleos en verad faltos de importancia, o en gritos desesperados para conseguir algo de atención, todo con actos a mi parecer sin mesura, dónde, lo menos importante, parece el respeto al otro.
Ciertamente, no sé si me apena, puesto que, a veces, la indiferencia me golpea sin compasión y no deja apertura a la diversión, en la cual los otros parecen rebozarse y jactarse.
Pero, ahora que lo pienso, que medito, que los analizo con vista y oidos, y los descubro ante el papel, me doy cuenta de que poco me importa ser diferente, es mas, me alivia, y mucho. Y no me jacto de ello, porque eso es lo ellos harían.
Ellos, tan faltos de conciencia, tan ciegos ante este mundo que se oscurece cada vez mas a nuestro paso. Ellos, que tan poca afinidad demuestran conmigo.
Ciertamente, no me creo superior, no lo soy, incluso a veces los envidio, envidio la ignorancia que mantienen, y por ello, por ver de lo que me rodeo, hoy, lejos de sonreír, me frustro.

Reflexiones que llevan al desahogo...

Con todas las cosas que pasan a nuestro alrededor, todas las puñaladas que te da la gente, todas las palabras que quedan vacías, todas las situaciones comprometidas que tenemos que pasar, y de repente, llega una, que te golpea el corazón, que te sacude la vida entera, y te das cuenta de que estás mas solo de lo que te pensabas.
Te das cuenta de que, todos somos unos falsos, yo me incluyo, unos egoístas y unos ilusos.
Todos pensamos que podemos ir pisando fuerte sin temor a que se rompa el suelo, pero, y que pasa si pisamos el camino de otra persona?
Y si levantamos su suelo sacudiendo todo su destino?
Claro, eso nos da igual, lo mas importante somos nosotros, nosotros y nosotros.
La verdad, no sirve de nada enfadarse o perder el tiempo discutiendo, o hablando simplemente, solo pasaré de la gente que me falle, que me traicione, tomaré sus palabras como papel mojado, que es lo que son, y seguiré por mi propio camino alterado pero impregnado de mi propia moral.
Total, de que sirve pedir explicaciones, si seguramente, todos tendremos nuestra parte de razón, pero como he dicho, somos egoistas, yo por supuesto tambien, y como ser egoista, quiero pensar solo en mi.
Aunque, no es cierto del todo, no puedo evitar pensar en otras personas, aquellas que me siguen tocando el corazón... Pero claro, no sirve de nada quitarse de su camino para que sean felices, tampoco ponerse delante de ellos y gritar algo como: -Eh! Que estoy aquí! Que te quiero, y pase lo que pase, haré lo que sea para dibujar una sonrisa en tus labios cada día. Que me da igual que o quien se interponga, o las tonterías que tenga que hacer para que tu rostro nunca esté serio, que no me importa siquiera si me ignoras, o si tengo que tragarme mis lágrimas como hasta ahora, lo único importante es que TU y solo TU seas feliz.-.
No importa si ya solo finges estar hueco para intentar olvidar un amor que te ha destrozado, aunque dentro d ti rebose el dolor, no importa que hayas enmarcado sonrisas en cuadros tristes y sin vida, y no importa que hayas fingido no ruborizarte cuando ella te ha mirado profundamente a los ojos.
Nada importa, porque, siempre llegará alguien que te joderá, hechando por tierra todos tus esfuerzos para estar normal con el mundo, que no se note que en el fondo, no eres egoísta, que en el fondo te importan los demás y no puedes vivir sin los abrazos de los que te rodean.
Nada importa, porque de repente, llega alguien a quien creías conocer, y logra remover toda la fortaleza que te habías montado, y logra dejar al desnudo tus mas profundos sentimientos, y de nuevo ahí está ella con su mirada, con su sonrisa, con eso que obviamente nunca habías olvidado, pero solo querías arrinconarlo.
Pero, de que sirve arrinconar algo, si una tercera persona derriba los muros de tu felicidad?...
De nada... Así que, ahí está ella de nuevo, imponente, y ahí esta el, como ha estado siempre, solo que ahora, mostrando su auténtica cara.
Desde luego, yo no soy la que se mostrará venébola esta vez, no... Ahora seré la egoista, pero nunca la falsa, nunca la hipócrita, SI la leal con los que me demuestren serlo y hasta que eso termine...
Ahora sí, seré fría, aunque mi pequeño e inutil corazón, arda por decirle *TE ODIO* y a ella por decirla *TE AMO*....

Versos... Vida...

Me apabulla, me tuerce, son cosas que me dislumbran, que me acontecen dentro de una minúscula urna de cristal que se tuerce cuando corrobora que está fría y desprotegida ante tu intensa mirada.
Son pequeñas motas de polvo, hambriento deseo, fugaz acontecimiento, sutil conciencia que se pierde entre esta luz que me traspasa el alma y me deja flotando entre nubes de algodon y lluvia.
Es un sentimiento ilicito este de la soledad, aún y sabiendo que hay hilos que te sujetan, que te apoyan, casi que te arrastran.
Son arrugas en este tiempo hostil, inverosimil, tan diminuto si lo piensas y a la vez tan grandioso pero superfluo.
Es una inteligencia ignorante en desmedida, sin salidas ni rincones, ni lugares ni precipicios.
Es la nada... Es el tiempo...
Es lo insólito y complejo...
Es mi vida....

Versos y vida...

Me apabulla, me tuerce, son cosas que me dislumbran, que me acontecen dentro de una minúscula urna de cristal que se tuerce cuando corrobora que está fría y desprotegida ante tu intensa mirada.
Son pequeñas motas de polvo, hambriento deseo, fugaz acontecimiento, sutil conciencia que se pierde entre esta luz que me traspasa el alma y me deja flotando entre nubes de algodon y lluvia.
Es un sentimiento ilicito este de la soledad, aún y sabiendo que hay hilos que te sujetan, que te apoyan, casi que te arrastran.
Son arrugas en este tiempo hostil, inverosimil, tan diminuto si lo piensas y a la vez tan grandioso pero superfluo.
Es una inteligencia ignorante en desmedida, sin salidas ni rincones, ni lugares ni precipicios.
Es la nada... Es el tiempo...
Es lo insólito y complejo...
Es mi vida....

Inspiración fugaz...

Demasiado helados en un infierno tan gris,
demasiado ardientes a veces entre hielos y tempestades,
demasiado etéreos cuando exigimos explicaciones,
y demasiado concretos cuando nos chocamos contra sus muros.

Sentir sus roces, produce diferentes reacciones.
Puede ser arduo, complejo, desconcertante.
Puedes sentirte atrapado, roto o vacío.
Puedes sentir querer salir de esa red que te destroza y te fatiga.

Tambien puedes notar un vértigo atrayente,
sueños en el despertar, y al dormir despertar del sueño.
Percibir que tu corazón no solo posee tus latidos,
pero que los tuyos dependen de otros.

Puedes sufrir lo indecible, reir lo imposible,
notar cosquillas o patadas en tu estómago.
Pero lo que todos notarán, es que se vuelven locos...

Hablo de los sentimientos...
Que hoy me ofrecen un poco de fugaz inspiración para dejar marcada mi huella una vez mas e instantáneamente...

Palabras marchitas... (17-08-2011)

Solo soy un pequeño polvo de hadas perdido entre la inconsciencia del tiempo...

Un rapto de la libertad y unas lágrimas aventureras recorriendo toda mi piel.
Solo soy una sútil persona, una marca de intransigencia marcada a fuego en mi propio tacto, un sentido roto, sin aprender u olvidado.
Solo soy esa huella que tienes de sus labios, un aliento perdido entre miles de diablos, que aún y quemándose en el infierno, intentan congelar mi corazón mientras avivan mi ira y mi dolor.
Soy un saludo de alguien importante, con su sonrisa imponente, quedando impotente ante sus labios de plata, que siempre sueñas besar, acariciar y sentir, para convertir los tuyos en oro.
Soy ese fruto prohibido, que pocos anidan a encontrar, y muchos ni siquiera se fijan, pero que se empieza a podrir entre la basura de las falsedades...
Tan sútiles palabras, marchitas de autoestima en un importante día, que debería llenarme de autoestima.
Pero me da pereza recordar, sentir que faltan palabras en mis oidos, caricias en mi piel, besos en mis labios.
Me da gracia recordar tiempos pasados, momentos fallidos y lágrimas congeladas, a veces me da por reir, otras por gritar.
Que mas da...
Si solo soy una pequeña persona mas, en este gran mundo de estrellas fugaces que no se paran a preguntar a esta pequeña estrella sin brillo, el porque de estar quieta, parada, y olvidada entre las estelas de la vía lactea de tu amor sufrido...
Tu amor marchito... Igual que estas palabras... Palabras marchitas...
Pues... Las palabras solo cobran sentido si se susurran al oido, en alguien que está dispuesto a escuchar, a sentir... A creer...
Por eso, creerme a mi cuando chillo, que nada acallara mis amores, que siempre escribiré, pues para algo tengo un pequeño don, pero que jamás dejaré de sufrir o ser feliz, aunque sea aún y en mi cumpleaños, esta felicidad que se puede nublar pero que jamás se esconderá del todo...
Aunque todo esté así...
Olvidado... Y marchito...

Palabras marchitas... (17-08-2011)

Solo soy un pequeño polvo de hadas perdido entre la inconsciencia del tiempo...

Un rapto de la libertad y unas lágrimas aventureras recorriendo toda mi piel.
Solo soy una sútil persona, una marca de intransigencia marcada a fuego en mi propio tacto, un sentido roto, sin aprender u olvidado.
Solo soy esa huella que tienes de sus labios, un aliento perdido entre miles de diablos, que aún y quemándose en el infierno, intentan congelar mi corazón mientras avivan mi ira y mi dolor.
Soy un saludo de alguien importante, con su sonrisa imponente, quedando impotente ante sus labios de plata, que siempre sueñas besar, acariciar y sentir, para convertir los tuyos en oro.
Soy ese fruto prohibido, que pocos anidan a encontrar, y muchos ni siquiera se fijan, pero que se empieza a podrir entre la basura de las falsedades...
Tan sútiles palabras, marchitas de autoestima en un importante día, que debería llenarme de autoestima.
Pero me da pereza recordar, sentir que faltan palabras en mis oidos, caricias en mi piel, besos en mis labios.
Me da gracia recordar tiempos pasados, momentos fallidos y lágrimas congeladas, a veces me da por reir, otras por gritar.
Que mas da...
Si solo soy una pequeña persona mas, en este gran mundo de estrellas fugaces que no se paran a preguntar a esta pequeña estrella sin brillo, el porque de estar quieta, parada, y olvidada entre las estelas de la vía lactea de tu amor sufrido...
Tu amor marchito... Igual que estas palabras... Palabras marchitas...
Pues... Las palabras solo cobran sentido si se susurran al oido, en alguien que está dispuesto a escuchar, a sentir... A creer...
Por eso, creerme a mi cuando chillo, que nada acallara mis amores, que siempre escribiré, pues para algo tengo un pequeño don, pero que jamás dejaré de sufrir o ser feliz, aunque sea aún y en mi cumpleaños, esta felicidad que se puede nublar pero que jamás se esconderá del todo...
Aunque todo esté así...
Olvidado... Y marchito...